Amor mío,
Es difícil escribirte estas palabras cuando sé que he fallado, cuando reconozco que mis acciones te lastimaron de una manera que nunca quise. Pero aquí estoy, sin máscaras ni excusas, porque mi corazón, a pesar de todo, sigue latiendo por ti, y no encuentro paz en la distancia que ahora nos separa.
He aprendido, en el eco de tus silencios, el valor de cada momento, de cada sonrisa, de cada promesa que compartimos. Si pudiera regresar el tiempo, tomaría con más cuidado cada instante, sabiendo que no siempre hay segundas oportunidades. Pero hoy, lo único que me queda es pedirte perdón, con la humildad de quien ama y acepta sus errores.
Aún bajo el peso de mis errores,
mi amor por ti sigue intacto.
Como el sol que busca al amanecer,
mi corazón te busca,
y en silencio te llama.
Sé que perdonar no es fácil, y que hay heridas que solo el tiempo puede curar. Pero también creo que el amor es lo suficientemente fuerte como para darnos otra oportunidad, para encontrar el camino de vuelta a todo aquello que un día nos unió. Te pido que me dejes demostrarte que he aprendido, que estoy dispuesto a construir algo nuevo, a sanar junto a ti.
Si en algún rincón de tu alma aún queda un poco de amor, si mis palabras alcanzan tu corazón, déjame estar a tu lado y caminar de nuevo contigo. Porque mi amor por ti es real, es profundo, y sigue latiendo con la esperanza de que podamos superar este dolor.
Con todo mi corazón,
yo, que siempre te he amado.
© Shoshan