Hoy digo adios para sanar mi corazon

Hoy digo adiós para sanar mi corazón

Querido,

Hoy, con una mezcla de nostalgia y serenidad, escribo estas palabras que son más para mí que para ti, pues al decirte adiós, busco cerrar el ciclo que aún duele en mi pecho. Durante tanto tiempo sostuve este amor, aferrándome a los recuerdos, esperando que algo cambiara. Pero hoy entiendo que mi corazón necesita sanar, y para eso, debo soltar aquello que no puede volver.

Te amé con toda la entrega de quien se lanza al amor sin reservas, sin temores. Pero también aprendí que el amor, para que sea verdadero, debe ser un camino compartido, una paz que nos sostiene, y no una lucha contra las sombras de la desilusión. Por eso, con cada palabra, siento que algo se libera, que el peso de este adiós comienza a transformarse en algo más ligero, en una promesa de sanación.

Como el río que encuentra su cauce,
dejo que el tiempo cure las heridas,
y aunque te suelte,
mi corazón hallará su paz,
su luz, su propio camino.

No guardo rencor, ni me aferro a las sombras del pasado. Al contrario, agradezco lo que compartimos, las lecciones que aprendí y la fuerza que encontré en medio del dolor. Este adiós es una decisión de amor propio, una promesa de que merezco algo más, de que mi corazón merece paz y alegría.

Hoy digo adiós para sanar, para permitirme soñar con un futuro donde mi amor florezca, sin temor ni cargas. Y aunque este cierre no sea fácil, sé que es necesario. Que la vida te lleve hacia caminos de paz, y que, en algún rincón del recuerdo, este amor que alguna vez fue nuestro quede en paz también.

Con gratitud y paz,
yo, que hoy me elijo a mí misma.

© Shoshan


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